El arte se mueve en Londres
Lorenzo Hernandez (Tenerife) ha conseguido reunir a artistas españoles de todas las edades en una misma sala de Londres; y lo ha hecho mediante la fotografía. Cincuenta fotos en blanco y negro visten la sala principal de la 12 Star Gallery, ubicada en la Europe House.
Lorenzo Hernandez posa delante de algunas de sus fotografías en la exposición Arte en movimiento, 2016.
El proyecto de Hernandez parte de la voluntad de captar al artista en su lugar de trabajo o trabajando. De ahí el nombre de la exposición: Arte en movimiento. Se muestran muchas profesiones distintas y, aunque algunas se repitan, la composición es siempre distinta. «El trabajo de fotógrafo es el mejor del mundo porque los artistas actúan o tocan solo para mí», comenta entre risas Hernandez.
Pese a que todos los retratados son artistas, no todos pueden vivir del arte.
Pese a que los retratados son artistas, no todos pueden vivir del arte. Algunos llevan muchos años viviendo y trabajando en la capital británica, otros acaban de llegar. Y quienes han aterrizado hace poco, lo han hecho de una manera muy distinta a como llegaran los primeros.
El 23 de febrero se cumplió una semana de la inauguración de la exposición, así que era una fecha propicia para el debate. Se reunieron muchos de los artistas que durante dos semanas han colgado de las paredes de la 12 Star Gallery para hablar de la exposición, pero también de la crisis económica. No era la idea, pero ella siempre está ahí al acecho. Enrique Arce, el rostro más familiar de la sala por haber participado en series de televisión españolas, está convencido de que Londres es «la capital mundial en lo que respecta al arte».
La fotografía de Hernandez es profundamente honesta con el público ya que nunca aplica retoques. Ni siquiera usa focos en sus sesiones. El fotógrafo saca partido a todo lo que tiene a mano en busca de una fotografía aparentemente sencilla.
«Lo importante son los artistas, no el fotógrafo», asegura Hernández. Por eso, es fundamental que los retratados acepten esa falta de artilugios y herramientas embellecedoras habituales en la fotografía de hoy. El fotógrafo quiere que los retratados se enfrenten a sí mismos, pero, tal y como confiesa la escritora Lala Isla, «esa honestidad puede ser brutal, te das cuenta de lo mayor que eres».
*Gracias a Lorenzo Hernandez por prestarnos sus fotografías.
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